Cristo en mi vida cotidiana

Meditación de la epístola a los Filipenses

L. Chaudier

Cuanto mas avanzamos en la vida cristiana, mas nos damos cuenta que esta vida es Cristo. La vida cristiana no es el mucho obrar, sino es ver a Cristo como objeto. En la cristiandad, se colocan coronas a los «grande cristianos». Vemos en esta epístola el coronamiento de la vida de un cristiano que, ciertamente, no ha tenido igual.

¿Cómo termina él? Como su Maestro. Ha comenzado su vida cristiana como su Maestro, continuado con su maestro, terminado con su Maestro y como su Maestro.

Si tenemos el deseo, deseo producido por Dios ciertamente, Él nos conducirá en un camino semejante. Pero si deseamos vivir de Cristo, mas nos pareceremos a Él y mas nos pareceremos de hecho a un siervo tal como el apóstol Pablo.

El resumen de este libro, de esta experiencia total hecha por Pablo, es esta: ¿Qué representa Cristo para nuestro corazón? ¿Cuál es nuestra vida todos los días? No se trata solamente de lo que decimos de Él, sino en el hecho de estar frente a las tentaciones, saldremos por Él victoriosos de la prueba. ¡He aquí el poder! ¡He aquí Cristo!. Si, por el contrario, en presencia de una tentación, cedemos, esto significa que la realización de poder de Cristo en nosotros no está a la altura de la prueba, y que esto nos pasa a veces porque nuestra constante debería ser el hacer brillar a Cristo mas y mas. Si hoy no mostramos a Cristo sino en apariencia, hemos perdido nuestro tiempo sobre esto. Igualmente si conocemos muchos pasajes de nuestra Biblia, todo este tiempo ha sido en vano. En el momento que, en presencia de una situación, nuestra manera de ser es la misma, Cristo no tiene lugar en nuestro corazón, y hemos perdido nuestro tiempo. Y podemos preguntar a cada uno que, si al instante de la tentación, la cantidad de conocimiento los ha librado. ¡Nunca!- Es Cristo quien nos libra. Si Cristo es precioso al corazón, uno pasa por una circunstancia siendo superior a la circunstancia. Y la belleza de este capítulo, es que encontramos a un hombre superior a todos. Él ha sido puesto en el fondo de la prueba, su corazón ha sido trabajado en lo mas hondo, y la mas grande de las pruebas ha sido probablemente ver el estado inquietante de los cristianos por todas partes. Pablo, por así decir, sale vencedor de todo esto; no es abatido.

No pensemos que no seremos puestos a prueba; todos los somos en diversos grados, y si tenemos pocas pruebas, puede ser que signifique que nuestra fe no es muy grande. Ciertas pruebas están en relación con el poder de nuestra fe para afrontarlas. Si, de repente, nosotros que nos creemos cristianos valientes y muy piadosos, honrando al Señor, se nos encarcela, quitándonos todo, cuanto tiempo necesitaríamos para que podamos decir en la carta que escribiéramos a nuestros amigos o a nuestros familiares: «Regocijaos siempre en el Señor.»

¡ Que felicidad, queridos amigos, es fortalecerse en las realidades vivas de la fe y de la verdad cristiana! . Uno se da cuenta que no le pone atención a la Palabra, se acomoda a los hábitos y a las palabras mundanas, y poco a poco pierde la fuerza. Esto puede suceder en un verdadero cristiano, en una familia, en una asamblea. Si el Señor no habla de una manera u otra, una asamblea se duerme y poco a poco se mundanaliza, luego pasado un tiempo ,es notoria esta mundanalidad. La noción del bien y del mal disminuye y con ella la suavidad de la conciencia.

Es necesario ser un cristiano ante Dios, ante Cristo.. Si somos cristianos ante los hermanos ante de serlo ante Dios, torceremos el orden de las cosas y no iremos muy lejos en nuestra vida cristiana.

-Cristo es mi vida, declara Pablo. ¿Deseáis matarme? .Matadme, voy al cielo; voy allí donde está mi corazón: vosotros me liberáis.-Sin ir mas lejos,¿ el corazón de cada uno de nosotros está presto a partir?. ¿No hay cadenas, lazos, un hilo que te retenga en este mundo? Si el Señor viniera ahora, ¿nuestro corazón diría: Señor, es esto que espero?- He aquí el poder de la vida cristiana.

A un cristiano que goza del cielo podréis darle todas las glorias del mundo, el las menosprecia. El mundo está muy bien hecho para abrir una larga avenida hacia el infierno, ¡y cuantos cristianos se dejan llevar!. No que ellos puedan estar perdidos, sino que les falta su vida. El maestro de este mundo es un experto en el arte de atraer los corazones; tiene sesenta siglos de experiencia.¡ Podemos decir; para mí, el vivir Cristo ¡ No decirlo solamente, sino realizarlo. Pablo lo proclama al final de su carrera, cuando estaba privado de todo: No tenía nada que perder y así algunos de los filipenses le hacia llorar. No eran sus perseguidores los que hacían llorar a Pablo. Cuando era perseguido Pablo y Silas, ellos cantaban en su prisión, sin embargo los cristianos a veces le hacían llorar.

 

Capítulo primero, v. 9 al 11: «Pido en mis oraciones, que vuestro amor abunde...» Nos imaginamos a veces que Dios va a darnos sabiduría de una sola vez; ¡Nunca! Se oye a veces dar este consejo: orad, y tendréis el pensamiento de Dios. Pero todo depende de vuestro estado moral. Si vuestro corazón tiene al mundo, no imaginéis que Dios os dará así su pensamiento. Es preciso primeramente quitar las escorias, y, cuando Dios haya purificado vuestro corazón- trabajo que puede demandar mucho tiempo-entonces veremos mejor.

«Que seáis puros, y no desmayéis » esto es lo que pide el apóstol en sus prisiones por sus hermanos filipenses. Cuando se está acorralado bajo circunstancias adversas, falta la fuerza para pensar en los demás. Esto es lo que hace el Señor. EL pensaba continuamente en los suyos en lugar de pensar en Él.

«... Que no desmayéis hasta el día de Cristo.» ¿Cuál es el día de Cristo? Este no es el día donde el Señor levantará a sus santos, sino aquel donde los presentará con Él, manifestando lo que cada uno haya hecho. Entonces cada uno brillará por la gloria de Cristo, después de haber sufrido la perdida debida a tal o cual infidelidad, puede ser la perdida de toda una vida. ¿Pensamos en el día de Cristo? Tenemos una gloria en perspectiva. El mundo tiene también sus glorias. Hay personas en el mundo que viven cincuenta años y mas buscando lo que llaman «la inmortalidad». Ellos, ambicionan una corona corruptible, nosotros, buscamos un corona incorruptible. ¿Y no tendremos la perseverancia de la gente de este mundo? ¡Ellos son pues mas inteligentes en su dominio que nosotros en el nuestro¡ Nosotros también tenemos un día de triunfo ante nosotros. Aquellos que han deseado el triunfo y la gloria en esta tierra sufrirán pérdida en el día de Cristo.

El motivo de la vida cristiana es el servicio, es el amor por Cristo. Todo lo que se hace, sino tiene como motivo, el amor a Cristo, es de la voluntad propia, y por consiguiente del pecado. A la inversa, lo que se hace para Cristo es para la gloria de Dios. ¿Y cual es el resumen de todo esto? OBEDECER - Obedecer para no hacer nada, obedecer para hacer algo, obedecer para hablar, obedecer para callar. No hay nada mas precioso para el cristiano.

Pablo ha hecho muchas cosas, Luego a él le es dirigida esta palabra muy dura:«Obedecer es mejor que los sacrificios.» ¿deseamos obedecer? Estamos persuadidos que la superioridad de nuestros conductores era esta: que la inteligencia del pensamiento de Cristo es la obediencia según esta inteligencia: si los hermanos pierden esto, pierden el sentido y el valor de su testimonio. El Señor tiene a sus siervos por todas partes, pero yo debo obedecer, y obedecer según la revelación que el Señor me hace de su pensamiento.

En los tiempos de desorden en el cual vivimos, se explica el porque un cristiano no puede asociarse con todos, porque haciéndolo, desobedecería a su Maestro.

¡Que felicidad es el no tener dudas ni vacilaciones! Dejadme esperar que estemos todos allí. El camino que se abre por delante del anciano como delante del joven, es el camino trazado por Jesús. Uno camina tras Jesús. Muchos están inquietos por orientar a la juventud. La juventud cristiana que desea escuchar, está muy orientada: Cristo está delante de ella. Si tiene dudas, es porque el oído no es sencillo, es cuando se desea arrastrar un poco o mucho en este mundo. Si os arrastráis un poco en el mundo hoy día, lo haréis mucho mas mañana; no estaréis con el Maestro.

 

En el Capítulo 1, Cristo es la vida del cristiano. En el Capítulo 2, El es su modelo .«Que haya también en vosotros este pensamiento...» Es preciso que este sentir esté. Y este sentir está en Cristo Jesús. Adán ha sido desobediente y ha encontrado la muerte, Cristo ha sido obediente hasta la muerte y muerte de cruz. Citamos a menudo este pasaje, ¿y queda aún algo en nuestro corazón? Es en la medida que Cristo llena nuestro corazón que podemos pensar en los demás, y allí está el gozo , no lo dudemos. El gozo para el cristiano, no es pensar en si mismo. Tal es el gozo experimental práctico, el verdadero, el santo gozo de la comunión y de la aprobación de Dios. Cuando hemos pecado, el Espíritu Santo nos ocupa de nosotros mismos, es necesario arreglar primeramente esto. Pero cuando caminamos con Dios, el Espíritu Santo nos ocupa de Cristo, y es el secreto para pensar en los demás. Que no se nos diga que esto es imposible; esta es la vida del cristiano, y es en esto que todos tenemos que progresar.

La Palabra de Dios enseña y la experiencia confirma que aquel que se ensalza será humillado. ¡Cuantos hombres, cristianos igualmente, son terriblemente altivos ! Dios derrumbará todo esto en un momento a otro; uno ha visto hundimientos solemnes. Uno no hará mentir a la Palabra de Dios.¡Cuantos ejemplos hay de hundimientos habiendo tenido gloria y orgullo han llegado a la ruina! Este principio es para la asamblea y particular para cada creyente. Todas las veces que nosotros nos glorificamos en pequeños detalles, Dios nos rebaja en esas cosas.¡Qué vigilancia deberíamos tener todos, por la gracia de Dios, para descubrir y reprender estos movimientos de nuestro corazón carnal!. Este es un trabajo continuo.

Si en el capítulo 2 Cristo es el modelo, en el Capítulo 3 vemos la imitación realizada en un hombre. Pablo dice en esencia; Muchos se glorían, pero yo también tengo títulos de nobleza de todas clases... Y es esto lo que le daba valor a los razonamientos del apóstol: otros despliegan sus títulos de nobleza, todos los míos son superiores... Pero yo los tengo por basura. Este era su estado permanente. ¿Por qué? Porque Jesús era el objeto de Pablo. - A nosotros nos sucede que nuestro objeto es Cristo pero además otras cosas. El servicio mismo es un peligro, si no ponemos atención, arriesgamos preocuparnos y pensar en el servicio mas que en el Maestro.

Pablo está en prisión. Es quitado de su servicio. ¿ No hay mas nada? No, El tiene una persona que no pueden quitarle: Cristo. Puede ser llevado a la muerte, pero no pueden apartarlo de Cristo. A menudo a nosotros por un poco de cosas que nos pasan, nos cambia nuestra firmeza: una crítica, una burla, una calumnia; tenemos rápidamente necesidad de busca un refugio; por la gracia de Dios, El está siempre allí. Para Pablo, se le había despojado de todo: reputación, se le ha calumniado; su vida, deseaban quitársela; su libertad, ha sido privado de ella. ¿Qué dice él? «Regocijaos en el Señor siempre» Un cristiano debería ser así. Mientras que nosotros, llegamos a perder nuestro gozo a menudo cuando nos llega el sufrimiento o el oprobio. A menudo amamos mejor a aquellos que nos halagan un poco, antes de tener la aprobación de Cristo. Esta es un infidelidad al Señor. Es necesario sondear nuestro corazón y dejarnos sondear por Él. El logra alejarnos delante de nuestros puntos de vista, mientras que, si somos fieles, tendremos la dulzura de la aprobación de Cristo, y esto permite atravesarlo todo. Tenemos mucho progreso que hacer, pero lo que le da e precio nuestra vida actual, es el valor de cada día que pasa. ¿Este día que pasó nos hizo ahondar raíces nuevas en este mundo, o bien nos ha hecho conocer un poco mejor el cielo? He aquí lo que Pablo dice en este pasaje a menudo leído, pero ciertamente a menudo realizado menos: «Estimo todas las cosas como basura...», yo también, me glorío de esto o aquello, pero las he llegado a estimar como pérdida. Esta experiencia corresponde a la declaración del Señor : «Es mejor entrar en la vida cojo... que ser arrojado en el lago de fuego.» En grados diversos, es siempre así. ¡Cuantas veces alguno ha entrado en la vida en condiciones de inferioridad externa, sin embargo será, en realidad, bendecido por la eternidad!.

Si Cristo no es lo primero en mi vida, es un trabajo que Dios va a hacer. El me parará en el camino una y otra vez. Dios es fiel, si nosotros, no lo somos. El es fiel hacia si mismo y hacia nosotros ¡Cuantas veces el Señor nos atrae así! El nos ama sin nosotros hacerlo¡ Seamos de aquellos que no retroceden ante este examen cotidiano! Pero si nosotros nos hundimos cada día un poco mas en el mundo y nos empeñamos en hacer nuestra propia voluntad, el examen será un tanto mas difícil. Hay un momento en nuestra vida donde será mejor dejar atrás este mundo; ¿por qué no lo haces enseguida? Pablo, él, llevaba cada día la muerte de Jesús.

¡Como se siente la necesidad de no perder de vista el sentido de la vida cristiana!. La vida cristiana, es Cristo, es la muerte realizada en cosas cada vez mas y mas numerosas, pero por el poder de Cristo. Pablo estaba allí, estimando todas las cosas como pérdidas. ¿Por qué? Porque Cristo le era infinitamente precioso. Es necesario dar a Cristo lo mas precioso de nuestras almas. Se toma a menudo el ejemplo de un niño que tiene en sus brazos una cantidad de juguetes. Si deseáis quitarle alguno, el se enojará. Dadle un juguete mas hermoso que los demás, dejará caer los juguetes que tiene en sus brazos, para tomar el mas bello. Si Jesús es precioso a mi corazón, lo que pasa alrededor de mí, lo que el mundo me presente, sus glorias, y sus banalidades.... no, esto no me interesa. Vivimos como extranjeros de estas cosas; este no es nuestro mundo, esto no nos interesa. Vemos exaltar las grandezas del hombre; somos mucho mas. ¿Se nos proponen riquezas? El cielo es de nosotros. He aquí como debemos vivir.

Capitulo 4: Hagamos uso de los recursos del verso 6: toda clase de oraciones y súplicas, por ejemplo, cuando estamos en angustia. Y lo mas triste es cuando llega la angustia, y nos sorprende en un mal estado. Cuando estamos así y Dios esta lejos de nosotros - o mas bien nosotros lejos de Dios- llega una angustia, y la sufrimos mucho mas, porque sentimos que Dios no esta allí.

Para un cristiano es mas triste cuando se pasa por una angustia, pues Dios no está allí, es mas triste que para un hombre del mundo. Porque cuando la angustia llega y estamos por así decir en el corazón de Dios, la consolación es inmediata, es la paz de Dios. Atravieso una tormenta; clamo a Dios; El responde: tengo la paz de Dios. Pero El no está solamente en las tristezas y angustias; está en la vida de todo los días: hoy, y mañana, si hay un mañana. La vida no está siempre marcada por circunstancias excepcionales. «Por lo demás hermanos...» ( v. 8 y 9), luego el Dios de paz estará con vosotros. Para tener al Dios de paz con nosotros, será necesario vigilar de que están ocupados nuestros espíritus. Es un ejercicio permanente, ¡pero como vale la pena!.Y para hacerlo, tenemos el gran recurso del verso 13: «Todo lo puedo en Cristo que me fortalece.»

Si, ¡ A El sea la gloria por los siglos de los siglos ¡ (v.20).